Estuve cenando en este restaurante hará un par de años, una noche de junio, empujada por varias opiniones de Tripadvisor, y no me defraudó: al contrario; fue un gran descubrimiento.
Es un pequeño restaurante situado muy cerca de la Plaza Osca, en Sants, una muy buena zona para tomar algo, tanto antes como después de cenar (sólo abren por las noches, de martes a sábado). Tenéis el metro de Plaza de Sants muy cerca.
La comida estaba riquísima, cada plato fue un placer para nuestros paladares. El sitio es muy acogedor, coqueto, cuidado, sin mucha decoración. La justa. Los dueños del restaurante, que son los dos chicos que estaban trabajando, cuidaron mucho los detalles. Sólo llegar nos ofrecieron una copa de cava y nos explicaron los platos y los vinos (sólo un blanco, un tinto, y un cava, pero muy bien escogidos)
Hay pocos sitios donde puedas comer tan bien, de calidad, platos como unas vieiras, o un rape espectacular, a precios razonables. (Nosotros pagamos 61 euros entre dos, aunque creo que han subido un poquitín os precios). Y las tartas....¡mmm! yo no fui capaz de escoger una sola, y me hicieron un "tastet" de 4 distintas. INCREÍBLES.
Sólo me queda deciros...: ID. No os arrepentiréis. Es perfecto para una cena de pareja o entre amigos, para charlar tranquilamente. Eso sí, reservad antes. Se llama "petit" por algo.
http://www.petitpau.cat/
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